Diciembre 2016-
Ricardo Augman, jefe de Gabinete de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Nación, destacó que la decisión de San Luis de transformarse en Estado llamante, “es una iniciativa extraordinaria, rica y comprometida. Creo que es un paso adelante respecto de otras provincias y pienso que esta decisión puede ser contagiosa y quizás sea una gran invitación para que el resto de las provincias argentinas puedan comprometerse en la recepción de gente que viene de una región muy castigada por una guerra brutal, con secuelas tanto físicas como psíquicas”. El funcionario nacional brindó ayer, junto a Martín Lettieri de la Agencia para Refugiados de la ONU, un taller para periodistas sobre personas refugiadas que organizó la Fundación Fisal con el Corredor Humanitario San Luis en el auditorio de El Diario de la República.
Augman señaló que “la provincia se ha comprometido con un plan muy serio, más prolongado aún que el Programa Nacional Siria, con otras características y otro soporte. Porque desde el Estado nacional estamos comprometiendo a otras familias; pero acá es el propio Estado provincial el que se hace cargo de un compromiso por dos años”.
San Luis ya recibió a las primeras cuatro familias mientras que la forma que tiene la Nación de recibirlas como refugiados es a través de personas que se anotaron como llamantes en Mendoza, Córdoba, Tucumán, La Rioja, Santiago del Estero, Salta y La Pampa. Augman contó que ese programa empezó en 2014 con la idea de que fueran sólo familias las que recibieran a los ciudadanos sirios que fueron forzados a dejar su país: “Pero como el Programa está en progreso, nos dimos cuenta que había otra alternativa que eran las organizaciones intermedias y no gubernamentales las que querían recibirlos. Hasta que llegó un momento en que el propio Estado provincial se convirtió en llamante. Por eso nuestra expectativa es que se puedan multiplicar las personas y familias solidarias que puedan brindarles un refugio y un lugar tranquilo donde poder curarse”.
El psicoanalista confirmó que hoy en el país “hay alrededor de 1.500 personas llegadas desde Siria con status de refugiados desde 2012 a la fecha. Nuestra expectativa es que la cifra siga en aumento porque el presidente anunció en algún momento que unas 3.000 personas podían llegar. Pero creo que es un número de inicio porque el Programa está en pleno crecimiento y lo estamos afinando para que funcione bien”. Y destacó que la reunión que mantuvo ayer con los medios locales, “es parte de afinar la comunicación y de que podamos hablar más cerca con la población, de la necesidad que tenemos como país de recibir a otros habitantes y promover conductas solidarias que nos suman a nuestro ser nacional. Porque la historia de nuestro país está construida en la solidaridad con la llegada de extranjeros”.
También destacó que mantienen un vínculo estable con San Luis para monitorear que se cumpla con todos los protocolos que establecen las leyes y convenciones de refugiados de la ONU que Argentina firmó en 1951. Añadió que los Cascos Blancos de Argentina son los que están insertos en el terreno del conflicto, “donde hacen un acompañamiento muy estrecho, día a día, y la verdad es que funciona muy bien”. Y explicó que dentro del Programa “a cada familia llamante de Argentina se le corresponde otra de Siria que se contacta con nuestra sede diplomática a través de Cancillería para activar el proceso de recepción”.
Además contó su experiencia personal porque sus padres migraron desde Polonia a la Argentina en la década de 1930: "Aquí se conocieron, se casaron y tuvieron sus hijos. Por eso mi compromiso con los refugiados".
Números del drama
65,3 millones de personas en el mundo hoy están desplazadas forzosamente de su lugar de origen.
21,3 millones están consideradas como refugiados. Y actualmente el 54% de ellos son de Siria, Somalía y Afganistán.
3,2 millones de habitantes solicitaron asilo en otros países durante 2015.
40,8 millones sufren por estar desplazados dentro de sus propios países. Colombia es la región que más sufre hoy por este problema.
5 millones de ciudadanos sirios están refugiados en países vecinos: hoy cada 4 habitantes de El Líbano, 1 es de Siria.
85% de la población Siria hoy vive en la pobreza.
250 visados humanitarios fueron aprobados por Argentina a ciudadanos sirios el año pasado.
6 años se cumplieron desde que se desató el conflicto armado en Siria.